La Ley 590 del año 2000, llamada Ley Mipymes, luego modificada con la Ley 905 del año 2004, establece jerarquías a las empresas por número de trabajadores y activos totales para denominarlas como micros, pequeñas o medianas. Sin embargo, estas jerarquías, en un sentido más profundo, se quedan cortas en la medición de la verdadera capacidad de las empresas, sobre todo las pequeñas, a las que Birch denominó empresas gacela cuando muestran alto crecimiento y de manera continua durante algunos años.
Estas empresas tienen una alta incertidumbre debido a que en su frenético aprovechamiento de las oportunidades caen en altos riesgos, cuya consecuencia exige una sabia gestión. Así, pueden crecer rápidamente y ser exitosas, como también pueden crecer rápidamente y luego sumirse en la desolación.
Otras ventajas adicionales son distintivas de la pequeña empresa y por supuesto que también tienen desventajas, pero el cúmulo de componentes positivos que las distingue hace posible su fortalecimiento, consolidación y alta rentabilidad, incluso si continúan siendo pequeñas.
Tamaño de la empresa, grandeza organizacional y mentalidad grande
Los propietarios de las pequeñas empresas, en su gran mayoría familiares, deben distinguir muy bien entre el tamaño de la empresa, la grandeza organizacional y una mentalidad grande en quienes la lideran. Lo primero ya fue esbozado al inicio de este artículo. Lo segundo se refiere al posicionamiento de la empresa, su reconocimiento de marcas, productos, servicios, y calidad corporativa. El tercer aspecto se refiere a la escala de ambiciones de los líderes de la pequeña empresa, que generalmente son los mismos integrantes de la familia propietaria.
¿Qué es la Mentalidad grande?
La mentalidad grande es la capacidad de las personas de pensar y actuar con una mente abierta a múltiples posibilidades, una mente positiva en la consecución de sus metas, resiliente en los momentos difíciles, creyente de sus propias capacidades, propensa a la superación permanente, irreverente ante la pasividad y el conformismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario